Ser herido lo suficientemente profundo, de forma que nuestro ego no puede finalmente remediarlo, es el Ser llevado a un nuevo nivel de conciencia, un nuevo nivel de ser donde se nos llama nuevamente a nuestro verdadero hogar.
Ésto es más que esperanza, ésta es la promesa de la vida misma, la promesa de la evolución.
Lo cierto es que el descubrimiento de tu blog y con él, de Zucchero ha sido algo muy grato y de lo que disfruto casi a diario.
ResponderEliminarGracias, corazón, por tu recuerdo.
Con Amor.